Tras muchos años de travesía en el desierto de la Segunda División B, el Granada, el histórico, el de siempre, ha conseguido el ascenso que le devuelve al panorama del futbol profesional español.
Tuve la gran suerte de ser uno de los pocos afortunados rojiblancos, en vivir in situ, el tan esperado momento y les puedo asegurar que será un recuerdo imborrable para el resto de mis días.
23 de mayo, un día después de cumplir 39 primaveras, un servidor se acordó de muchas cosas y de muchas personas, en un momento histórico, lleno de sentimientos y emociones incontroladas.
Son muchos los agradecimientos que debo mencionar y seguro que alguno me dejaré en el tintero, sin embargo hay una gente a los que creo máximos merecedores de un reconocimiento infinito.
A nivel personal, tengo que decir que fueron varios los responsables de que, no solo yo, sino toda una peña, la que estuviera en Alcorcón, como la que representa al Granada CF en tierras catalanas.
En primer lugar el club, que tuvo a bien reservarnos un puñado de entradas, todas las que necesitamos, con todas las facilidades posibles para que no nos perdiéramos un evento tan esperado. En segundo lugar a 5001 Radio, que dedicaron parte de su escaso tiempo y limitados recursos a gestionarnos todos los trámites relacionados con el adelanto del pago, posterior retirada y entrega de las localidades en mano, para nuestra asociación en tierras madrileñas.
No quiero dejar pasar la oportunidad de agradecer también a todos y cada uno de los miembros de la Peña de Barcelona que estuvieron presentes en tan ilustre momento. Ramón, Jordi, Alcazar, Valdivia, Sergio, Manolo y sus respectivos familiares y amigos que vivieron el día más emocionante en las últimas décadas del conjunto de Recogidas 35.
Alcorcón fue una fiesta rojiblanca y la verdad es que, salvando algún energúmeno, por ambos lados, todo transcurrió de forma tranquila y sosegada entre las aficiones locales y visitantes. Al final del encuentro y tras la invasión de campo correspondiente, los hinchas de uno y otro equipo, intercambiaron aplausos y gritaron al unísono aquello de -“GRANADA Y ALCORCÓN, A SEGUNDA DIVISIÓN”-
No voy a extenderme en análisis, que para eso ya hay multitud de crónicas de otros tantos medios acreditados, pero aun así y a riesgo de ser malinterpretado, si que he de reconocer, al menos desde mi humilde punto de vista, que el cuadro amarillo, ha sido ligeramente superior al granadino en el computo global de la eliminatoria. Esto no hace mas que engrandecer, aun mas, el merito de los hombres de Fabri.
Para finalizar mi ronda de agradecimientos, no podían faltar los jugadores, equipo técnico y directivo, pero sobre todo a la afición. Nuevos acérrimos seguidores, jóvenes y entusiastas, los vehementes de siempre, todas las peñas y resto de aficionados.
A todos, Gracias por este ascenso rojiblanco y horizontal.
Magnifica cronica de un magnifico dia, el cual muchos de nosotros nunca olvidaremos, yo y mi hijo lo vivimos juntos y sera un recuerdo imborrable a sus catorce años.
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