No era este el artículo que tenia pensado escribir hoy, pero la actualidad manda y esta mañana (ayer para el lector) me he despertado con la desagradable noticia de la posible marcha del jugador australiano del CB Granada al Regal FC Barcelona. A priori y a vote pronto, parece la peor de opciones para nuestro club, pero reflexionando un poco con paciencia y una vez repuestos del impacto inicial, podemos llegar a ver las repercusiones positivas del traspaso del alero nazarí a la ciudad condal.
De entrada, Joe, no había empezado bien la temporada, su apatía era evidente y casi todos lo achacamos a la frustrada intención del jugador por fichar con el equipo valenciano del Powers Electronic el pasado verano, cuando todo parecía hecho. Poco a poco hemos ido viendo como Ingles se “acostumbraba” a su continuidad en Granada y resignado, iba mostrando su mejor cara, sobre todo cuando el entrenador le pedía que jugara de “uno”, con excelente rendimiento. Al final, a falta de confirmación definitiva, el australiano, se ha salido con la suya. No estaba a gusto y es mejor que se vaya y poner en su puesto a un hombre con los cinco sentidos puestos a los pies de la Alhambra.
Para un equipo modesto como el nuestro, la de Ingles, es una baja considerablemente importante, aunque podemos confiar en la definitiva explosión de Korolev, el descaro y agresividad de Stefansson o en la reconversión de Karl para sustituirle con garantías de éxito. La plantilla de Poch tiene mimbres suficientes para suplir esta baja sin necesidad de perder la cabeza y volverse loco fichando un sustituto, pues así, de nada serviría la inyección económica que el traspaso supondría y dejaría sin razón el hecho de la operación a estas alturas de la temporada.
Dos jugadores por puesto, son el mínimo con el que un mister desea contar para repartir minutos de juego y descanso a sus titares, sin que con ello, restemos eficacia al juego del equipo. Gianella y Mario (cuando se recupere de su lesión) para el puesto de base, Coby Karl, se queda solo en el puesto de escolta, aunque la polivalencia de Stefansson y Korolev, podrían ayudarle en caso necesario y viceversa para el puesto de alero, ya que los tres pueden ocupar esa posición sin problemas. Kurz y Samb en la posición de “cuatro” y Jesús junto a Paulao Prestes en la de pívot. No me parece una mala plantilla y si la marcha de Joe, significa el cuadrar el presupuesto y con ello garantizar la continuidad del conjunto rojiverde, pues me parece una operación necesaria.
Hay jugadores que parecen haber despertado o al menos, haber evolucionado a mejor, en su juego, como lo son el jugador nacido en Dakar, Mamadou Samb o el brasileño Prestes. Esto unido al nuevo rol de Korolev, cuya categoría parece innegable, me hacen ser optimista con respecto al futuro.
Esta situación me estropea un quinteto inicial que tenia preparado en mente para el CB y que hubiera sido espectacular y muy curioso. ¿Se imaginan un equipo de salida en pista con 4 hombres por encima de 2,00 metros? Ingles, 2,03 m. como director de orquesta; Karl 1,96 m. echándole una mano; Korolev 2,06 m. en el perímetro; Kurz 2,06 merodeando la zona por fuera y Prestes 2,10 pisando la pintura. Mas espectacular, aunque algo menos coherente, seria un quinteto formado por Samb en el puesto de tres y pasar al ruso a la posición de Coby, todos y cada uno por encima de los dos metros de altura.
Por lo visto, a Trifón le gustan los aleros altos y los pívots bajitos, curiosidades de este singular deporte.
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